Cuento los segundos que lentamente se escurren en el silencio de la noche, abrazo con fuerza mi almohada y con voz apagada digo "ángel de mi guarda, no dejes que le pase nada, ángel de mi guarda dile que no se aleje de mí, dile cuanto la amo, hazle llegar este abrazo, ángel de mi guarda búscala y tráela a mi lado, tráela a mi... tráela a mi" y temblando de frio me quedo pegado al calor de ese abrazo y empiezo a dormir, sueño una pesadilla que hace temblar mi corazón, en el sueño voy caminando hacia su casa, en mi mano un ramo de rosas, voy confiado de hallarla y dispuesto a entregarle todo mi amor, "la adoro" es lo que pasa por mi mente mientras me acerco a su hogar, faltando un par de casas para llegar la encuentro con alguien más, ella recargada sobre la pared, él besándola apasionadamente... yo me paralizo un segundo por la escena, mi cuerpo se llena de rabia, quisiera matarlo pero estoy hundido en desilusión, suelto las rosas, doy media vuelta y desaparezco de su vida; entonces despierto agitado del sueño, sin sentir alguna emoción las lágrimas empiezan a salir de mis ojos e me invade una sensación de nerviosismo y desesperación, no puedo conciliar el sueño y así transcurre la noche, al amanecer he perdido el apetito, doy vueltas por mi casa pensando, solo pensando, quiero verla, quiero estar con ella, tengo miedo de perderla.