Todos me alejan de sus vidas, a nadie parezco importarle, es como si no tuviera un lugar al cual pertenecer, soy el plato de segunda mesa, al que buscan solo cuando necesitan ayuda y nada más, nadie me orbita, nadie quiere orbitarme, han sido los peores días de mi vida, yo ya no sé que hacer, se me escurre la vida.