El sufrimiento ataca mi alma,
La soledad invade mi interior,
Las lágrimas secan mis ojos
Y mis gritos se vuelven gemidos
Difíciles de escuchar.
Mi cabeza se ha vuelto
Un laberinto de confusión,
Busca la salida
Pero aun no la haya,
Se siente mas confundida
Y a veces pierde la esperanza.
Decidme entonces que hacer,
Es verdad que no comprendo,
Siento miedo de solo pensar
Que nada resultara.
Despertarme de esta pesadilla cruel,
Ahuyentar a los fantasmas de mi pasado
Traerme la alegría y la paz
A este corazón afligido por tanto pensar.
Se tu esa ayuda,
Que mi alma hoy pide a gritos,
Hazla libre de esta confusión…